Para todos es conocido que las ondas de las que nos rodeamos día a día no son beneficiosas para nadie. Ha llamado mi atención un artículo que recoge algunas declaraciones de Nino Treusch, que tras ocho años en el negocio de la telefonía móvil se pregunta en su obra "El conejo blanco" si relmente conocemos los verdaderos peligros de utilizar este tipo de aparatos.
Los posibles efectos que produce el teléfono móvil, ¿supone un verdadero motivo de alarma o se trata más bien de puro alarmismo?
Cierta es la rotundidad con la que tanto la OMS como la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer advirtieron ".. del riesgo de desarrollar un tumor cerebral tras el uso intenso y continuado del móvil"
Los efectos de este tipo de ondas no tienen "una repercusión de la noche a la mañana, sino que sus efectos se van notando con el paso de los años". Es este largo plazo lo que para Treusch supone la gran barrera en la lucha contra el sector. "No se puede limitar el uso de los teléfonos cuando la sociedad no está viendo los efectos que producen, y cuando no los verán hasta dentro de bastante tiempo... La tecnología ha avanzado más rápido que la ciencia"
Los expertos aconsejan el uso de auriculares o altavoz para no mantener el aparato en contacto con la oreja.
"Quiero que la gente comience a hacerse preguntas, que reaccionen y vean que, aunque es un trabajo de fantasía, no está muy alejado de una más que posible realidad", concluye Treusch.
Esta conclusión también es compartida por nosotras.
¿Alguien reflexiona sobre esto cuando lo están llamando, antes de cogerlo? ¿Seríais capaces de, si fuera demostrado su nocividad, apagar el móvil para siempre? Son muchas preguntas que algunas vez te las planteas, pero que no suelen llevarte a ninguna parte...
Hola :)
ResponderEliminarLa verdad es que este tema es muy interesante, sobretodo porque es algo con lo que convivimos cada día. Utilizamos el móvil desde para ponernos una alarma que nos despierte cada mañana, hasta para matar el tiempo cuando vamos en el autobús. No nos separamos de él en todo el día y, si lo hacemos, no es durante más de unas pocas horas.
En pocas palabras: "Dependemos del Móvil". Aunque nos cueste admitirlo.
Las sinapsis neuronales, se realizan a través de impulsos eléctricos y químicos , ¿Tal vez podrían estas "microondas" degenerar esa transmisión de la información? Se me plantean muchas dudas ante este tema, pero como decís, son efectos a largo plazo y es muy difícil estudiarlos.
Personalmente, no creo que sea el móvil el único problema. Pensad que estamos en la época de la tecnología, y las ondas electromagnéticas están presentes en prácticamente cualquier parte de nuestro día a día: Wiffi, Bluetooth, Ondas de Radio, Satélites.. ¡¡Hasta para cocinar usamos "microondas"..!! Por lo que si éste tipo de ondas produce Cáncer o alguna otra enfermedad no hay mucho que hacer al respecto.
Me ha gustado el post :)
Discrepo de Jesús. Depender de algo limita tu libertad. Incluso de algo potencialmente útil, como un móvil, o saludable, como la actividad física. Depender te impide elegir, y cuando no puedes elegir no eres libre. Para mí, la libertad siempre es preferible a la dependencia, aunque a veces pueda resultar más molesta. Porque ser libre implica ser responsable, mientras que la persona dependiente no tiene opción y, por tanto, no puede comprometerse con lo que elige. A veces es más cómodo declararse "dependiente", porque así renuncio a mi libertad, pero también a mi responsabilidad. Lo explica muy bien Eric Fromm en su "MIedo a la libertad"
ResponderEliminarLo siento Victor, pero no estoy de acuerdo completamente contigo. Es cierto que debemos primar la libertad, pero pienso que una vez hemos tenido la libertad de elegir lo que queremos, pasamos a depender de otros factores relacionados con nuestra elección.
ResponderEliminarUn ejemplo lo tenemos en la propia asignatura. Tú nos has dado a elegir la forma de evaluarnos. Supongamos que, al ser libres de elegir, elegimos la opción del blog. A partir de ese momento, pasamos a depender de la red para poder lograr nuestro objetivo, ya que sin ella, no podemos acceder al blog.
Si, por poner un ejemplo, has decidido libremente, comprar una casa, un coche, etc.. Dependes de tu trabajo para lograr mantenerlo.
Tal vez sea a eso a lo que te refieres al decir que las elecciones conllevan responsabilidades.
Lo mismo ocurre con los móviles. A la velocidad que se desarrolla la sociedad actual, el móvil es indispensable para llevar a cabo nuestros objetivos. Hay gente que elige un trabajo y no podría realizarlo sin el móvil o sin el ordenador. No se si me explico adecuadamente.
Me gustaría, si me lo permites, hacerte una pregunta Víctor. ¿Crees que podrías estar un mes sin encender tu teléfono móvil o tu ordenador si tú realmente quisieras?¿O existen determinados factores externos que te obligarían a hacerlo?
Espero tu respuesta.
Un saludo.
Hola! Muchas gracias por comentar. Lo siento por contestar tan tarde, pero no me manejo muy bien por estos mundos, aunque sé que no es excusa.
ResponderEliminarComparto algunas de vuestras opiniones y discrepo en otras.
Pienso que estamos muy cercanos a todo tipo de ondas, perjudiciales aunque no se tenga conciencia de ello. También creo que como dice Jesús, puedes ser libre de elección, pero trás esto creas un vínculo de dependencia.
Y no por tener esa dependencia dejas de tener que actuar consecuentemente. Puedes ser libre dentro de una dependencia, aunque a priori parece contradictorio. Por ejemplo y siguiendo el ejemplo de Jesús. Puedes ser libre al elegir el hacer un blog o no de la asignatura, tras esto, creas una dependencia pero a la vez tienes libertad para expresarte como mejor sepas.
Y a la pregunta que haces Jesús te contesto ya que la semana pasada me pasó algo que creo que contestaría.
Soy de un pueblo que está un poco lejos, el cargador se me olvidó allí y tras agotarse la batería se apagó. No quería comprarme otro cargador ya que una semana no era nada, bueno no era ni una semana... eran 4 días.
Ahí me di cuenta además de mi dependencia, de lo necesario que me puede resultar el móvil ya que había quedado con unas amigas y no sabía como contactar con ellas. Tuve que recurrir al ordenador, a las redes sociales. Asique mi contestación a la pregunta es que podría estar un mes sin móvil y sin ordenador pero lo pasaría a duras penas ya que estoy muy acostumbrada a la comodidad que me ofrecen.
Jesús, ¿piensas que tú podrías hacer lo mismo? ¿Estar un mes "incomunicado" mediante esos medios?